¡La carnita asada nunca supo tan bien!
Si estás leyendo esto, es porque probablemente ya sabes que este asunto de la carne asada no es solo una cena, es un evento. Y si además le agregas adobo de mostaza, ¡tienes una fiesta en el plato! Así que prepárate, que hoy vamos a darle un giro a tu parrilla con esta receta que hará que tus amigos se cuestionen por qué no te han nombrado chef de la casa aún.
Lo más importante
| Elemento | Descripción |
|---|---|
| Carne | Selecciona una buena pieza, tipo ribeye o arrachera, que la calidad aquí es esencial. |
| Adobo de mostaza | Ese toque único que hará que tus papilas gustativas bailen reguetón. |
| Tiempo de cocción | Entre 10 y 15 minutos en la parrilla. Si no es así, probablemente estás haciendo algo mal. |
Ingredientes o materiales
- 1 kg de carne (ribeye o arrachera, si eres fancy).
- 2 cucharadas de mostaza (la buena, no esa que viene en los hot dogs).
- 4 dientes de ajo (sí, los que te hacen maldecir antes de que termine el día).
- 1/4 taza de jugo de limón (si no tienes limones, sé creativo, pero no se te ocurra usar jugo de naranja).
- Sal y pimienta al gusto (sin exagerar, no estamos en un concurso de cocina).
- Opcional: Un chorrito de salsa picante. Porque, ¿por qué no?
Paso a paso
1. Prepara el adobo
Mezcla la mostaza, el ajo machacado, el jugo de limón, sal y pimienta en un tazón. Este es el momento donde el bueno se convierte en genial, así que asegúrate de no ponerle freno a tu creatividad.
2. Marina la carne
Coloca la carne en una bolsa de plástico resellable o en un tazón. Vierte el adobo sobre la carne y asegúrate de cubrirla bien. Este es el momento de dejar que la carne se ‘relaje’ en el adobo. Idealmente, deja marinar por al menos una hora. Si tienes tiempo, más mejor. Cuanto más tiempo, más sabor. Así que, ¡no te sientas apurado! Puede ser un romance entre la carne y el adobo.
3. Precalienta la parrilla
Mientras esperas, enciende la parrilla a fuego medio-alto. Espera que esté caliente, pero no tan caliente que parezca un volcán en erupción. Queremos carne jugosa, no carbón.
4. A la parrilla
Coloca la carne en la parrilla. Aquí es donde comienza la magia. Cocina cada lado entre 5 a 7 minutos, dependiendo de qué tan ‘viva’ te guste tu carne. No seas tímido, dale la vuelta a la primera señal de que se está poniendo demasiado dorada.
5. Descanso y a servir
Una vez que la carne esté lista, déjala reposar unos minutos. Esto le da chance a los jugos de entrar en acción y no acabar en tu plato como un charco. Luego, corta y sirve. ¡Listo! Ahora puedes lucirte como el maestro asador que siempre supiste que eras!
Trucos y variaciones
Si quieres llevar esto al siguiente nivel, prueba añadir un poco de miel al adobo. La combinación de dulce y salado es pura delicia. También podrías experimentar con hierbas como el romero o el tomillo. ¿Sabes cómo se dice? ¡La carne asada es un lienzo en blanco!
Oh, y recuerda, si quemas la carne, ¡no te preocupes! Siempre puedes decir que estás creando un nuevo estilo gourmet.
Recomendación
Y si al final todo sale bien, ¡me cuentas cómo te fue! Porque aquí entre nos, la satisfacción de haberlo hecho tú mismo es impagable. Así que, ¡a disfrutar y que el festín comience!