Bueno, si estás leyendo esto, es porque probablemente ya sabes que asar carne para las comidas de los días de semana no es solo una genialidad entre los carnívoros, sino que puede ser una solución rápida y deliciosa para tus cenas. Imagina no tener que enfrentarte a un ¿qué comemos hoy? a las 6 de la tarde, ¡eso es casi un triunfo de vida! Así que, sin más preámbulos, veamos cómo hacerlo.
Lo más importante
| Lo esencial | ¿Por qué? |
|---|---|
| Carne (obviamente) | ¡Porque estamos hablando de asar carne! |
| Condimentos | Para que no sepa a… nada. |
| Parrilla o plancha | ¿Quieres asar carne en una sartén? ¡Venga ya! |
| Tiempo | Porque no tenemos vidas para esperar eternamente. |
Ingredientes o materiales
- Un buen trozo de carne (puede ser pollo, res, cerdo… lo que te haga feliz)
- Sal y pimienta (básicos, pero imprescindibles)
- Ajo en polvo o fresco (para dar ese toque de chef)
- Un chorrito de aceite de oliva (o el que tengas en la despensa)
- Opcional: tus especias favoritas (porque estamos aquí para impresionar)
Paso a paso
Paso 1: Prepara tu carne
Primero, saca la carne del refrigerador y déjala reposar un poco. Lo último que quieres es que se ase como si estuviera en un maratón de hielo. Sazónala generosamente con sal, pimienta y esas especias más que pueden hacer que tus papilas gustativas hagan una fiesta.
Paso 2: Calienta la parrilla
Vamos, ya no hay vuelta atrás. Enciende esa parrilla y ponla a calentar. Si usas una plancha, lo mismo, pero asegúrate de que esté bien caliente. Casi como cuando esperas que el microondas termine y estás listo para devorar. ⏲️
Paso 3: ¡A asar!
- Coloca la carne en la parrilla. ¡Escucha ese sonido!
- Deja que se dore unos minutos. No la abras a cada rato como si esperases ver por arte de magia algo nuevo.
- Una vez que se ve bien dorada, dale la vuelta. ¡Hazlo con estilo! Más que un giro, debes parecer un maestro en acción.
Paso 4: Chequea la cocción
Para saber si está lista, usa un termómetro de cocina. Si no tienes uno, la buena vieja técnica del corte también funciona, pero cuidado, no lo hagas como si contaras la historia de tu vida.
Paso 5: ¡Descanso!
Antes de servir, dale un par de minutos para que repose. Es como permitir que tu carne se tome un respiro después del ejercicio.
Trucos y variaciones
Si quieres llevar esto al siguiente nivel, prueba marinar la carne unas horas antes. Anticípate) a tu éxito. También puedes experimentar con diferentes tipos de carnes: el cordero, esas costillas ¡no son las únicas que pueden hacerse irresistibles!
No olvides la salsa. Siempre hay espacio para una buenísima salsa barbacoa o chimichurri (o cualquier cosa que haga que cada mordisco sea una experiencia). Pero, por favor, no te olvides de probar antes de servir. No queremos sorpresas desagradables.
Recomendación
Y ahí lo tienes, ¡el arte de asar carne para comidas de días de semana hecho fácil! Si al final todo sale bien, ¡me cuentas cómo te fue! Porque, seamos francos, si hay algo más gratificante que una buena carne asada, es escuchar el “wow” del que te rodea. ¡A disfrutar y buen provecho!